Como cuidar tus botas
En invierno, las botas son una apuesta e inversión segura pero… ¿cómo conseguir que duren perfectas más tiempo?
Muy fácil: sigue los nueve trucos que te proponemos.
- Protégelas de la lluvia, la nieve y salpicaduras.
Porque a veces confundimos las botas de piel con las de agua, y acabamos quedándonos sin ellas a los pocos meses de estrenarlas. Existen sprays protectores para protegerlas ante posibles accidentes. - Cuando ocurre lo peor, arréglalo al instante.
Supongamos que estrenas tus botas de ante esta misma tarde, y que algún líquido acaba sobre ellas. Aplica un producto especial quitamanchas sin esperar a llegar a casa. - Hidrátalas.
Para que la piel brille y dure más, es necesario que la hidrates con productos especiales. - Invierte en un kit de cuidado de ante.
No tiene sentido que inviertas en unas botas y no en lo necesario para mantenerlas. - Protege la forma.
Guarda los papeles protectores que vienen en la caja o compra unas hormas de madera. - Usa productos especiales cuando empiecen a aparecer marcas o a dañarse el color.
Mantenerlas como nuevas durante más tiempo es más sencillo si no dejamos que los daños se empiecen a acumular. - Límpialas bien después de cada uso, y cúbrelas durante los meses que no las usas.
- Vigila el tacón.
Las tapas desaparecen en un abrir y cerrar de ojos, y con ellas el tacón acaba dañándose tocando directamente el suelo. - El truco definitivo: la suela de goma.
En invierno, añadir una suela de goma a tus botas alargará considerablemente su vida y las todavía más prácticas.